Escríbeme en la piel.

 

Roza cada uno de mis poros, despacito,

con cariño, sintiendo cada cicatriz,

cada perfecta imperfección.

 

Bésame todos los lunares.

Traza las líneas con los dedos

hasta formar un mapa que

solo tú y yo conozcamos.

 

Posa tu dedo índice y deslízalo,

poco a poco, con suavidad,

hasta que notes como se agita

mi respiración con tus caricias.

 

Escríbeme en la piel,

un para siempre.