¿Habéis tenido o tenéis mascotas? Sólo la gente que comparte su vida con un amigo peludo sonreirá al leer este texto.

Es amistad por la alegría que se lleva cada vez que te ve, da igual que haya pasado un fin de semana, un mes o cinco minutos, son incapaces de ocultar su emoción y esa carita de máxima alegría por verte a ti y porque tú le estás haciendo caso.

Es lealtad por la compañía que te hace a diario, esos besitos por todos lados a cada pequeña oportunidad que tienen, esas siestas de dos con su calor peludo calentando la cama o el sofá, esa atención que presta girando su cabeza, casi sin parpadear, porque lo estás diciendo o haciendo para tu mascota es lo más importante del planeta.

Es empatía por esa alegría difícil de ocultar cuando sabe que os vais juntos de paseo o que vais a jugar juntos un rato. Es la emoción cuando le das de comer su plato favorito. Es la felicidad cuando tu mano le dedica mimos y caricias. Es la tristeza al ver su cara de pena cuando se da cuenta de que tú vas a salir de casa pero él se queda allí, esperando a que vuelvas.

Porque para tu amigo peludo tú eres su mundo y te lo demostrará incondicionalmente cada día.

El de foto es mi perro Erik, hace años que nos dejó pero lo sigo echando demasiado de menos. Era muy poco cariñoso, pero siempre me daba un beso en la nariz, sólo uno.