El caos es la suma de tu orden y el mío. Es la suma de tu buen humor y de mi forma de cabrearme como una cerilla.

 

El caos somos tú y yo, tu derecha y mi izquierda entrelazadas, nuestro caos personal, las ganas locas de amarte, las ganas de estrangularte cuando me sacas de quicio, las ganas de estar juntos para siempre.

 

¿Quién ha establecido que la palabra caos es despectiva? Para mí es todo lo contrario, el caos es lo que mantiene nuestra llama viva, lo que me hace quererte cada día un poco más, lo que hace divertido lo aburrido, lo que hace que merezca la pena quererte.

 

Adoro nuestro perfecto caos.