Todo lo bueno de la vida despeina.

Correr hasta quedarse sin respiración, reírse a carcajadas, salir de fiesta, caminar bajo la lluvia, bañarse en el mar, emborracharte, las cosquillas, conducir con la ventanilla bajada, follar, pasear por la montaña, viajar, ver una película al aire libre, montar en bicicleta, saltar, besar, dormir, tomar el sol, pelearse por el mejor sitio del sofá, hacer el amor, leer envuelta en una manta, bailar hasta que te duelan los pies, cantar, quitarse la ropa para ponerte en modo vagabundo al llegar a casa…

¡VIVIR despeina!

Así que no te preocupes tanto de la apariencia, ¡porque la gente feliz es la más despeinada!